Artistas Populares

Nací en Bogotá en 1995 y desde pequeño he sido un nómada, una condición que ha moldeado profundamente mi visión del mundo. Mi vida se ha caracterizado por constantes desplazamientos, primero con mi madre, de barrio en barrio, y luego por distintos países, lo que me brindó la oportunidad de experimentar culturas y perspectivas diversas, y aprender varios idiomas. Esta riqueza de experiencias me acercó a la filosofía desde una edad temprana, un refugio intelectual y emocional que me permitió abrigarme en un espectro que hoy amo, amando algo que nunca pensé ser, esa idea de artista que soy, puliendo una idea de arte que adoro, el esfero se volvió una revolución para mí, de esto tan simple y banal se convirtió un referente de todo en mí. Curiosamente, mi incursión en el arte no fue planeada, mientras estudiaba idiomas en la universidad, una clase de arte apareció por azar en mi camino, lo que empezó como una distracción antes de irme a mi casa, rápidamente se convirtió en una pasión. Fue allí, bajo la guía de una tutora que me desafió a crear mi primera obra, donde descubrí la fascinación por el arte, el esfero, una herramienta que parece tan simple, se transformó en mi medio de expresión, volviéndose un símbolo de mi identidad artística. Mi proceso creativo se centra en la delicadeza e ironía, algo que mi técnica permite hacer de una manera única, y de tal manera criticar una vivencia o una perspectiva de mi entorno, para mí como artistas hay dos cosas relevantes, la estética y la crítica, normalmente, en el arte es una metodología clara, esta desarrolla el arte y define estilo y concepto, pero aborda una vivencia, algo que como autor intento definir y resaltar. Para mí, el arte no solo debe ser bello, sino también invitar a la audiencia a una interpretación más profunda de su entorno y sus vivencias. Cada vez que plasmo mis emociones y perspectivas en una obra, siento que puedo conectar con el espectador a un nivel muy personal, lo que convierte cada pieza en una oportunidad para transmitir aquello que las palabras no pueden expresar. Mi obra es una invitación a ver más allá de lo obvio, a encontrar belleza y significado en lo cotidiano, y a cuestionar las realidades que nos rodean, ver el potencial de mi técnica y el poder expresar todas mis experiencias en un cuadro, es una de las emociones más grandes que puedo transmitir.