Arquitecto profesional, profesión que al momento deja de lado para dedicarse a la búsqueda de su camino como artista y artesano; Hacia 1997 emprende un proyecto encaminado a llevar a un nivel naturalista los móviles de aves que hasta entonces no se había visto en el entorno artístico nacional. A través de la talla en madera y el estudio minucioso de cada especie seleccionada, realiza varias exposiciones y participa en diferentes ferias con muy buena aceptación por parte del público conocedor del tema y del quienes aprecian una obra bien elaborada. Con el pasar de los años incursiona en la escultura de las aves ya no móviles sino perchadas en su ambiente natural, y por último decide llevar el tema al bajo relieve con un nivel de realismo que permite al observador identificar cada especie con sus respectivos detalles morfológicos y de color, con especial énfasis en los colibríes. Para estas piezas usa la técnica de moldeado en aglomerado de papel.